INTRODUCCIÓN
Al referirnos a los pueblos originarios es hablar de un profundo sentido de pertenencia, cultura, tradiciones y lenguas que han subsistido y de las que tenemos tanto que aprender, valorar y apreciar a partir de su forma de organización, interacción con sus semejantes y con la naturaleza, entre otros principios.
De acuerdo con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (NIP), Veracruz es hogar de más de un millón 101 mil personas que pertenecen a una etnia, con mayor presencia los pueblos Chinanteco, Huasteco, Mazateco, Nahua, Oluteco, Otomí, Sayulteco, Tepehua, Texistepequeño, Totonaco y Zoque.
Diversidad y contrastes de los pueblos indígenas en Veracruz
Diversidad
En 2020 en Veracruz de Ignacio de la Llave, 75.1% de la población es católica, 14.8% protestante, cristiano evangélico y en tercer lugar se ubican las personas sin religión con 7.9%. Observa la siguiente gráfica y compara cómo ha cambiado el porcentaje de personas que practican alguna religión, así como de las que no practican ninguna de 2010 a 2020.
Hablantes de lengua indígena
La distribución espacial de la población hablante de lenguas indígenas en el sotavento Veracruzano, muestra dos espacios de mayor concentración de dicha población: El conjunto montañoso de la Sierra de Santa Marta y de los municipios de Santiago Sochiapa y Playa Vicente. Otros puntos que resaltan en el mapa, aunque con menor intensidad, son Uxpanapa y el municipio de Zaragoza.
En Veracruz de Ignacio de la Llave hay 663,503 personas mayores de 3 años de edad que hablan alguna lengua indígena. Las lenguas indígenas más habladas en esta entidad son:
Otros municipios de la antigua Jurisdcción de Acayucan, que tanto en 1746 (Villaseñor y Sánchez , 1952) como en 1831 (Iglesias, 1966) fueron registrados como pueblos exclusivamente indígenas (Sayula, Oluta, Texistepec, Soconusco, Jáltipan, Cosoleacaque, Oteapan, Ixhuatlán y Moloacán), ya desde mediados del siglo XX reportaban bajos porcentajes de población hablante de lenguas indígenas con respecto a la población total.
Dato curioso
De cada 100 personas que hablan alguna lengua indígena, 12 no hablan español.
La importancia indígena en la dinámica política y sociocultural del Sur de Veracruz
No obstante la disminución de la población hablante de lenguas originarias en el SOtavento Veracruzano, la presencia indígena se percibe de varias maneras. En el nivel político, en las décadas de los ochenta y noventa del siglo pasado un grupo de nahuas del municipio de Zragoza creó una organización política de izquierda - el Comité de Defensa Popular (CDP) -, a través de la cuál logró enfentar el control que el PRI tenía sobre el ayuntamiento durante casi una década de los noventa.
Totonacos
Cultura y sociedad
Las coloridas vestimentas de los danzantes, la música, así como la coreografía de las danzas guarda especial relación con su concepción del mundo (Ichon, 1973). Todas las danzas incorporan una serie de rituales de purificación, curación y consagración de las máscaras, vestimentas e instrumentos musicales (Kelly, 1952-53; Croda León, 2005; El arte de ser totonaca, 2009). Por ejemplo, en el municipio de Coyutla en la Sierra de Papantla, durante la semana que dura la fiesta patronal en honor de San Miguel.
En la región totonaca de Veracruz, los hombres de esta etnia llevan camisa y pantalón de manta, huaraches, un sombrero de palma tejida y un pañuelo rojo en el cuello.
Por su parte, las mujeres portan un vestido hecho de manta que, generalmente, lleva bordados en el cuello. También es común que porten un quexquémitl y una falda de lana tejida o de manta, un rebozo o un chal de algodón liviano (éste también es útil para cargar a los niños y bebés).
¿Cómo es su gastronomía?
Los totonacas se compone principalmente de maíz y frijol. No obstante, también acompañan su dieta con otros ingredientes como el chiltepín verde; tomate pequeño de milpa; quelites y yerbas verdes como cilantro criollo, yerbabuena y epazote.
Entre los platillos más comunes encontramos los bocoles, tortillas hechas a mano, guisos con semillas de pipián, espolvoreadas con pipián, frijoles en caldo, chicharrón y chilchotle o chayote rebanado acompañado de epazote.